“Ojalá todos pudiésemos disfrutar plenamente de nuestras experiencias, proyectos, nuestros vínculos y relaciones, sin la nesidad de requerir de apoyo psicológico. Ahora, cuando por cualquier motivo se nos presentan conflictos internos, miedos, inhibiciones o períodos de angustia en algún momento de nuestra vida, la ayuda profesional debería de consumirnos el menor tiempo posible. Es como llevar el auto al mecánico. Lo dejamos porque “no sabemos qué le pasa”, hace un ruido raro, sentimos una vibración cuando le damos arranque, se nos apaga el motor, o directamente no arranca. Pero no podemos quedarnos sin vehículo durante mucho tiempo hasta que nos orienten sobre cual podría ser el problema. Necesitamos solucionarlo lo más rápido posible para ponernos en marcha nuevamente y continuar con nuestro viaje..”